Mejora la iluminación de tu casa
Diciembre 1 de 2016Prepara papel y lápiz porque ponemos a tu disposición los mejores trucos y pautas para mejorar la iluminación de los espacios en tu casa: matices que visten tu hogar transformando sus esferas, creando nuevos ambientes, mejorando la intensidad… Sea cual sea tu caso, seguro que puedes sacar alguna idea para aplicar.
- Ten siempre presente esta máxima: la iluminación de tus salas nunca debe deslumbrar y es mejor sin sombras. Para ello, antes de colocar tus lámparas prueba qué zonas quedan con sombras y cómo es la mejor manera de evitar que la luz deslumbre, la clave es que sea suave y uniforme. Además, si te gustan las paredes claras un truco que mejorará la iluminación es no ponerlas blancas sino con alguna tonalidad parecida: blanco, beige…
- ¡Di sí a los puntos de luz! Multiplícalos: suavizan el ambiente y distribuyen la atención creando una sensación de amplitud. Un solo punto de luz, por ejemplo en el techo, puede crear una iluminación demasiado agresiva y encima si no son de bajo consumo y son demasiado potentes gastarán más, dará la impresión a la estancia de ser más pequeña. Eso por no hablar de lo incomodo que es estar intentando que no haya sombra constantemente, ¿la solución? Añadirle focos laterales que contrarresten estos efectos.
- Aparte de usar más de un punto de luz, es interesante mezclar varios tipos de luz dentro de una habitación con el fin de jugar con sus efectos y transmitir unas sensaciones u otras: una luz cálida hará tu estancia más confortable mientras que una luz fría provocará tranquilidad o energía en función de como la distribuyas.
- Juega con la iluminación para recalcar y ocultar la presencia de objetos. La iluminación te permite destacar un mueble, un cuadro, etc. Eso sí, para este tipo de iluminación, conocida como decorativa o indirecta, plantéate utilizar lámparas halógenas con reguladores. Hay otros recursos aliados para hacer la iluminación de tu casa más acogedora: velas, cortinas, lamparitas auxiliares, el color de los muebles, espejos; por ejemplo, un truco que le dará estilo a tu casa es optar por espejos iluminados con apliques.
- Aprovecha las ventajas de la luz focal, un complemento muy útil para la luz general e ideal para espacios definidos como rincones de lectura o zonas de estudio.
- Algo esencial es contar con una buena luz en el baño y la cocina. La iluminación central suele ser menos intimista, aunque en los cuartos de baño cada vez menos, y se tiende a optar por la artificial pero muy efectiva luz blanca de tubos fluorescentes. En la cocina prueba a añadir varios puntos de luz sobre la encimera, fregadero, etc. te hará más fácil el día a día. En los baños cobra relevancia sobre todo el espejo y una opción muy exitosa es añadirle luz a los muebles, con halógenos de bajo consumo.
- Los apliques en la pared permiten atenuar el contraste entre el centro y las esquinas de la habitación, que a veces pueden estar demasiado oscuras.
- Una premisa más que estética de seguridad, es que te cerciores de que las zonas de paso, principalmente pasillos, estén correctamente iluminadas y que los interruptores sean accesibles. Y hablando de interruptores, opta por aquellos que te permitan regular la intensidad de la luz, con ello tendrás el poder de crear tus propios ambientes en función de la necesidades: relajación, energía…
- Y cuidado porque el exceso de luz también tiene consecuencias en nuestra salud y no siempre son buenas: dolor de cabeza, insomnio, etc.
No te olvides que una buena iluminación puede aportar encanto y personalidad a cada habitación, siempre que des con la ubicación y los elementos correctos.